jueves, 14 de abril de 2011

No desaparezcas, recuerdo

 Tenían colgada aquella fotografía, en la pared del dormitorio de la Residencia donde vivían hacía un tiempo. Cada mañana al despertar, era lo primero que veían. Si  los dos recordaban, se miraban a los ojos y mantenían una conversación parecida a ésta:
 - ¿Desde cuándo nos conocemos?
- Desde siempre.
- ¿Hasta cuándo estaremos juntos?
- Hasta siempre.
- ¿Me recordarás mañana?
- No lo sé... ¿Y tú a mí?
Entonces se abrazaban. Y disfrutaban de esos pequeños encuentros que aquella enfermedad aún les brindaba. Llegaría el día en que aquella fotografía no les dijera nada a ninguno de los dos. Pero hasta entonces, no permitirían que el Alzheimer
les separara...

4 comentarios:

Sandy dijo...

El verdadero amor, no se reduce a lo físico ni a lo romántico.
El verdadero amor es la aceptación de todo lo que el otro es, de lo que ha sido, de lo que será y de lo que ya no es......

Mar dijo...

Sandy, te aseguro que no se puede añadir nada a lo que has escrito, sin estropearlo.
El amor de verdad es justamente eso...

Pandora dijo...

Los recuerdos del tiempo pasado constituyen nuestro futuro.

Solo un buen recuerdo nos hará ser incansables en la busqueda de otros momentos de felicidad.

Cuando el amor es verdadero aunque ya no te acuerdes si te esfuerzas aun ves...

Mar dijo...

Los recuerdos son importantes, pero si hay algo que lo es verdaderamente es el "ahora". Si lo piensas bien es lo único que tenemos, y es lo que debemos disfrutar.
Si no tuviéramos "ahora", los recuerdos no tendrían lugar donde alojarse...